Las nuevas tecnologías han llegado con todo para apoderarse de los hogares, ahora su foco son los más pequeños quienes desde temprana edad ya tienen un amplio conocimiento de Smartphone, computadoras, tablets y juegos de video. Lo que a muchos tardo años en poder disfrutar, ahora las nuevas generaciones lo tienen al alcance de la mano en infinidad de opciones para elegir la que prefieran e incluso algunos varias a la vez.
Esta avalancha de entretenimiento digital se ha venido convirtiendo en un dolor de cabeza para las familias pues los jóvenes, principalmente, se están viendo atados a una adicción a este tipo de juegos aislándolos y encapsulándolos en esos mundos virtuales, creando en ellos no solo problemas sociales y psicológicos, si no físicos también, siendo la salud afectada por todos los costados.
Adicción a los videojuegos, nueva preocupación
La adicción a los videojuegos es una tendencia reciente causada por los juegos lanzados en las consolas más populares del momento, su contenido es sumamente adictivo para algunas personas por el tipo de juego, las misiones que plantea y en general por ser un escape muy interesante de la realidad que los rodea normalmente.
Esta adicción a los videojuegos se traduce en serios problemas sociales, familiares y psicológicos del joven, no por que padezca de algún trastorno como tal, al menos no en todos los casos, sino porque lo enajena de la realidad creando conflictos en su ambiente por fuera del juego, volviéndolos antisociales, sedentarios y hasta violentos cuando la adicción es alta.
En la salud física puede verse el impacto al volverse completamente sedentario, aumentando los índices de obesidad pues la alimentación de quienes padecen adicción a los videojuegos suele ser alta en grasas, azucares y sustancias dañinas para el organismo.
La falta de movimiento y ejercicio físico les deja un estado físico deplorable empezando a presentar problemas del corazón, colesterol, azúcar, visión y hasta motricidad en casos extremos.
Cuando se presenta adicción a los videojuegos, las personas tienden a descuidar su salud y aseo personal, convirtiendo las comidas en algo necesario para poder continuar jugando pero para lo que no están dispuestos a parar, por lo que la comida chatarra se vuelve su mayor aliada.
Cuando de salir se trata, las personas adictas a los videojuegos lo evitan siempre, prefiriendo quedarse dentro jugando por lo que la actividad física se reduce al mínimo.
El sueño es otro afectado, la alta concentración y el tiempo dedicado a estos elementos excesivamente produce desordenes del sueño, aumentado el insomnio y desgastando físicamente a la persona que lo padece.
La adicción a los videojuegos se puede evitar
La ansiedad, la ira y la irritabilidad son algunos de los síntomas que presenta 
este mal. Permitir que los niños y jóvenes pasen su tiempo libre en videojuegos no es malo, al contrario, puede ayudarle a mejorar la concentración y a agudizar la actividad deductiva.
Sin embargo todo en exceso es malo, por lo que controlar los tiempos que se le permite a un niño o joven jugar en estos instrumentos es crucial para evitar que se vuelva adicto a ellos.
